domingo, 16 de noviembre de 2014

“LA CENCERRADA”


“LA CENCERRADA”

 

Una costumbre típica y divertida de Cercedilla era “la cencerrada”. El nombre  lo dice todo, hacer sonar los cencerros.

Cuando un viudo o una viuda se volvían a casar, algunas personas, prioritariamente hombres jóvenes que sabían la fecha, se organizaban en grupo con cencerros y eran acompañadas por el resto de vecinos, hombres, mujeres, chicos/cas  etc. para “burlarse graciosamente” de la pareja en su primera noche de la nueva boda en forma de broma.

Hacían sonar los cencerros muy deprisa en la puerta  de su casa, o les paseaban en el recorrido hasta llegar a la misma después de la ceremonia, esperando una propina para ser invitados,  cuando eran generosos los dejaban tranquilos, de lo contrarío seguían sonando los cencerros hasta que les daban la cantidad que ellos esperaban para invitarse.

Hubo cencerradas “muy sonadas”, no solo por los cencerros sino por la incomprensión de la broma, como el caso de un Jefe  de Correos que vivía en el Frontón,  llamo a las fuerzas del orden y fueron denunciados.

Lo normal era que los recién casados lo tomaran bien y aceptaran la broma con más o menos ganas, recordando las Cándido y Juana, Francisco y Seve,  Iluminado que al negarse estuvoa punto de ir al “pilón”,  y algunas más. Las más simpáticas, y divertidas fueron las cencerradas de las  bodas de Constantino y Dolores, Luti e Eugenia,   Lucio y Brígida, que lo tomaron con muy buen humor, los pasearon bajo palio, el techo era de una saca con excrementos de gallinas, y los precedían botes que echaban humo maloliente, pero ellos alegres y compartiendo el cortejo como un día de fiesta, Poli (sarten) y Carmen que los pasearon por las calles subidos en una carretilla, y cuando se caía le cantaban, “Poli se ha muerto, se ha muerto Poli” (bis ,bis)

De esta tradición se desconoce el inicio y el final, pero los años que se mantuvo esta costumbre fueron unos momentos divertidos que compartimos  muchas personas y  que muchos todavía lo podemos  recordar.                 

Maribel M.M. 2014.

 


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